Desde hace siglos, la humanidad ha estado en búsqueda de las respuestas a interrogantes que nos han rondado internamente: ¿Quiénes somos? ¿De dónde venimos? ¿Hacia dónde vamos?
Para conocer las fuerzas que se mueven detrás de estas preguntas, han existido muchos métodos de clarividencia como los oráculos, las lecturas de bola de cristal e incluso de manos.
Por ello, no es de extrañar que con los años estas prácticas se hayan fortalecido y dado pie a otros modos de entender el presente y tratar de dilucidar nuestro destino.
En este contexto se fue forjando un conjunto de creencias que pretende establecer una relación oculta entre los números, los seres vivos y las fuerzas físicas o espirituales, más conocido como numerología.
La numerología “Se trata del estudio de las relaciones místicas entre los números, las letras y los patrones. Como sucede con otros métodos de adivinación, esta herramienta se utiliza para ganar un acceso más profundo al conocimiento sobre nosotros mismos, los demás y cómo nos relacionamos con el mundo. También nos puede revelar nuestros deseos más profundos y qué tenemos que hacer para satisfacerlos, y es una estupenda herramienta para entender el karma y qué es lo que arrastramos de una relación a otra”, comentó la astróloga estadounidense, Lisa Stardust.
La historia de la numerología
Según Stardust, los orígenes de esta práctica se remontan al período entre el 569 y 475 AC, luego que el filósofo griego Pitágoras se dedicara al estudio de la metafísica de los números. Él creía que cada uno de estos números podía reducirse a un dígito entre el uno y el nueve, los cuales estarían relacionados a vibraciones mágicas y espirituales del ser.
Otras prácticas como la Kabbalah, un libro de textos que explica el misticismo y pensamiento judíos, también reforzó este concepto al utilizar las 22 letras del alfabeto hebreo para encontrar el significado numerológico de un nombre. “Cada letra está alineada con un número, y luego todos estos números se suman. Esta técnica fue utilizada en principio por los filósofos kabalísticos como una forma de esconder el texto de la Kabbalah de los no creyentes. Con el tiempo, empezó a utilizarse como una manera de encontrar nuestra misión y nuestro rol en la vida, a partir de nuestro nombre”, informó la experta.
Sumado a lo anterior, en la antigua Babilonia existía una metodología llamada Caldeo, la cual se centraba en la vibración de los números del uno al ocho. “El número nueve en Caldeo es sagrado, y representa todo lo que uno podría anhelar en el mundo, así como la conexión con lo divino. En esta técnica mágica miramos nuestra fecha de nacimiento y los números alineados con las letras en nuestro nombre para encontrar nuestro destino”, indicó la astróloga.
Cabe señalar, que la numerología fue introducida en el mundo moderno por L. Dow Balliett, una influyente espiritualista de principios del siglo XX que escribió varios libros sobre el tema. Una de sus estudiantes, la dra. Juno Jordan, es reconocida por haber hecho que las personas conocieran el método de un único número que se emplea hoy en numerología.
Nuestro “número de vida”
En base a nuestro número de vida, la numerología puede descifrar la misión que tenemos definida y que nos hace sentir mejor, más plenos y realizados.
De acuerdo a la numeróloga Julieta Rutenberg, “Desde que nacemos comenzamos a cargar con una energía que ‘no nos pertenece’ del todo, a diferencia del día que nacemos, que es un número ‘elegido’ por nosotros (…) Nuestro nombre y apellido trae información sumamente valiosa que, a través de la numerología, revela mucho más de lo que creemos saber de nosotros mismos. Además de describir nuestra energía interna -la más sutil y silenciosa- y externa -la que mostramos hacia los demás- nos explica qué funcionamiento hemos venido a aprender y trascender dentro de nuestra familia de origen”, comentó al diario Clarín.
En definitiva, “Es el camino que tienes predestinado y que estarás recorriendo durante esta vida. Te muestra tu verdadera naturaleza, lo que te hace una persona única, y la deuda kármica que tienes que trabajar”, agregó Stardust.
Para Nadir Otermin Hamed, Máster Holística y psicóloga transpersonal y experta en Terapias Complementarias, “La misión marca el recorrido hacia la felicidad ya que, al sintonizarnos con nuestro propósito superior, con lo que vinimos a aprender, automáticamente comienzan a abrirse todos los caminos frente a nosotros: el camino del amor, el camino de la prosperidad y el camino del éxito en todas sus manifestaciones”.
“Una vez que la encontramos, resulta mucho más fácil expresar satisfacción con la vida y hay una especie de reconciliación con todo lo que nos ha tocado vivir antes de encontrar este sendero de perfección que es el cumplimiento de nuestra misión“, concluyó el especialista.
¿Cómo calcular nuestro “número de vida”?
Para dar con este dígito, debes sumar el número del mes, más el día, más el año en el que naciste.
“Digamos que naciste el 27 de octubre de 1990. Debes sumar los números del día de tu nacimiento: 2 + 7 = 9. Luego sumas los dos dígitos del 10 (el mes de octubre): 1 + 0 = 1. Finalmente, sumas el año 1990: 1 + 9 + 9 + 0 = 19. Como el último número es doble, lo descomponemos: 1 + 9 = 10. Y una vez más, lo volvemos a descomponer, sumando 1 + 0, para obtener un número simple, el 1″, señaló Lisa.
A ello, añadió que el siguiente paso es sumar “todos los números principales: 9 (fecha de nacimiento) + 1 (mes de nacimiento) + 1 (año de nacimiento) = 11. Reducimos entonces este número, sumando sus dos dígitos: 1 + 1 = 2. Esto significa que tu número de misión de vida es el 2, y se te considera como una persona que construye o manifiesta”.
¿Cuál es el significado de mi número de vida?
A continuación, te compartimos la explicación de Julieta Rutenberg sobre el significado de los números de vida del 1 al 9:
Número 1: Representa la acción, el que avanza solo buscando las experiencias que le darán su identidad. Busca desarrollar sus capacidades. Positivo, original, y creativo. Es este número la búsqueda del verdadero “yo soy”. Debe siempre gestionar la acción para sacar adelante sus ideas vanguardistas. Líder por naturaleza, dominante, ambicioso, y por lo general individual. Es el número del ego.
Profesiones: inventor, diseñador, analista, management, CEO empresarial, dueño de su propio proyecto en general.
Número 2: Mediador, diplomático, adaptable, cariñoso y receptivo. Esta frecuencia siempre debe trabajar el plano emocional. Trae consigo el trabajo de dar forma a las ideas y rematrizar aspectos emocionales aprendidos. Su energía es de cooperación, solidaridad y asociaciones. También debe trabajar la dualidad y las ambivalencias típicas de este número tan polar. Les cuesta la soledad y deben aprender a no confundir aspectos de terceros con los propios. Habrá que templar la inseguridad para no caer en celotipias y manipulaciones.
Profesiones: pintor, maestro, enfermero, asistentes ejecutivos, vendedores, acompañantes terapéuticos.
Número 3: Aquí se combina las cualidades de los números 1 (creatividad) y 2 (forma) para manifestarse en la frecuencia 3, que es la verdadera expansión. Necesidad de interacción social. Busca comunicar y autoexpresarse. Hay alegría y entusiasmo, genera una onda expansiva que, junto con su creatividad, hace que todo sea posible. Buscará socializar. Su costado artístico e histriónico siempre lo pondrá chispeante e inquieto generando proyectos a lo grande. Esta frecuencia puede ponerse sumamente desordenada e irresponsable, por lo cual debe estar atento a sus prioridades.
Profesiones: tareas de comunicación, escritor, músico, abogado, chef, actor, manejo de grupos en general, deportes.
Número 4: Bajo un 4 se buscará orden, firmeza y estabilidad. Donde se encuentre este número la consigna es crear cosas terrenas donde predomina la forma y la sustancia. La disciplina los acompaña, pudiendo construir lo que se propongan. Lo más importante para esta energía es animarse al cambio y a la reestructuración, porque de lo contrario no puede materializar como corresponde, ya que la tozudez los cristaliza en su peor versión. La represión que caracteriza a este número debe diluirse para no generar síntomas.
Profesiones: tareas de gobierno en general, administrativos, constructor, gerente, contador, militar, comercio.
Número 5: Esta es una vibración que busca libertad y movimiento. Representa el libre albedrío del ser humano, por lo cual, hay mucha versatilidad y cambios permanentes. Está relacionado con la sexualidad y el erotismo, ya que es una frecuencia muy física. La comunicación es su don y suele ser mediador por naturaleza. Su curiosidad lleva a este número a adentrarse a lo desconocido en busca de la novedad. Aquí lo importante será no llegar a irresponsabilidad y a los excesos, puesto que se pueden volver lujuriosos y superficiales y no logran generar compromisos profundos.
Profesiones: vendedores, comunicadores y periodistas, todo lo que tenga que ver con viajes y turismo, marketing y publicidad.
Número 6: Esta frecuencia busca difundir la armonía, la verdad y la justicia. En el 6 predomina el amor y la compasión. Busca comprometerse con sus seres queridos aceptando responsabilidades sociales y familiares. Esta vibración le atrae lo doméstico, el matrimonio y el hogar. Dotado para las artes y la música, lo que toca lo vuelve armónico. Buscará siempre el equilibrio y el consenso, pudiéndose postergar a sí mismo más de una vez. Aquí el reto será saber poner límites. Y buscar por sobre todas las cosas la retroalimentación en sus diferentes roles. Tiende a dar más de lo que recibe, porque le aterra no ser querido ni validado por los demás. Tendrá que aprender a sortear las dependencias afectivas.
Profesiones: áreas de salud y belleza, psicología, servicio social, artes, músicos, decoradores.
Número 7: Este número procura establecer una filosofía de vida intentando descubrir los misterios que se ocultan en esta vida. Es naturalmente profundo y comprometido con el saber; su curiosidad por lo místico lo llevará siempre por caminos muy elevados. La mente es su aliada, ya que su capacidad de análisis e intuición es el carro que lo empuja. Piensa más allá de cualquier estructura. La soledad y la naturaleza son sus bastiones. Le colaboran para ordenarse y bajar a tierra por un rato. La meditación, contemplación y reflexión los contiene. Esta frecuencia puede ponerse un poco soberbia y egocéntrica. Pueden llegar a deprimirse y ponerse confusos, ya que el pensamiento excesivo los agota. Deberán aprender a integrarse.
Profesiones: científicos, médicos, cirujanos, escritores, maestros, filósofos, líderes de instituciones solidarias.
Número 8: Este número buscará asumir siempre el poder. Los controles de las situaciones son fundamentales para su seguridad. Por su nivel de tenacidad y esfuerzo, obtendrá logros en donde se lo proponga. Líder por naturaleza, siempre encabezará cualquier pirámide obteniendo logros financieros y materiales. La ley y la justicia son ejes fundamentales. Para este número, el karma es fundamental, lo que siembran cosechan, por lo cual, deben estar muy atentos a sus acciones. Suelen sentirse dueños de la verdad poniéndose muy autoritarios. Se vuelven rígidos e inflexibles con los demás y sobre todo con ellos mismos sufriendo su autoexigencia.
Profesiones: mundo de los negocios y política, deportistas de alta gama, justicia en general, banqueros, contadores, escribanos, coaching.
Número 9: Aquí se destaca la abnegación y la compasión. En esta frecuencia, el amor lo abarca todo, ejecutando un servicio permanente. Viene a compartir su saber con el universo. Su recorrido existencial lo ha llevado a buscar un cierre de su totalidad, invitando a este número a llevar a cabo limpiezas de cualquier cosa que ya no le sea útil. Debe alivianarse para no cargar con lo que no le corresponda. Es la realización en casi todos los planos: físico, mental y espiritual. Es una frecuencia que se multiplica a través de la compañía. Se conectan fundamentalmente con lo místico y trascendental. El 9 puede pecar de volverse confuso e incoherente. Se pondrán ermitaños de no soportar las críticas, ya que son testarudos y perfeccionistas.
Profesiones: docencia, literatura, actividades religiosas, servicio de cualquier tipo, médicos.
Descubre si tienes un número maestro
En numerología, existen algunos números denominados “maestros” por su particularidad: el 11, el 22 y el 33. Estos, antes de reducirlos a un dígito, tienen un significado de importancia para su representado.
Número 11: representa una persona carismática, súper intuitiva y que usa sus poderes para ayudar o sanar a quienes buscan iluminación.
Número 22: representa una personalidad soñadora, que puede llevar sus objetivos y sus sueños a la realidad. Nos referimos con frecuencia a este número como ‘Maestro Constructor’.
Número 33: representa una personalidad súper espiritual y filantrópica que quiere ayudar y elevar a la humanidad antes que elevarse a sí misma.
¿Cómo ayuda la numerología a entender nuestras vidas pasadas?
En palabras de Lisa Stardust, tu número de misión de vida también corresponde a tu número de deuda kármica, el cual nos da pistas “sobre las lecciones que tienes que aprender de tus vidas pasadas”.
A continuación, te compartimos los comentarios de la experta sobre sus significados kármicos:
Número 1: denota a una persona que sacrificó una parte de sí misma en el pasado.
Número 2: define una personalidad que necesita abandonar el materialismo.
Número 3: muestra una personalidad que no pudo expresarse a sí misma en el pasado. Por lo tanto, tiene emociones reprimidas en esta vida.
Número 4: denota a alguien que fue abandonado por su familia en el pasado, por lo que con frecuencia se siente no apoyado.
Número 5: muestra una personalidad egoísta, que está aprendiendo a dejar de serlo.
Número 6: tiene que trabajar en la autoaceptación en esta vida para ser feliz.
Número 7: define a alguien que fue competitivo en el pasado, pero está aprendiendo a trabajar con otros de manera compasiva y cooperativa.
Número 8: significa que no vivías en la realidad. Ahora, tienes que lidiar con las dificultades reales de la existencia.
Número 9: es alguien que tuvo apegos negativos en el pasado y ahora está buscando positividad.
Número 11: es alguien que nunca ha dado un salto de fe. Como resultado, están forzados a tomar riesgos en esta vida.
Número 22: necesita estar en el foco y dejar brillar sus atributos. Deben dejar de esconder sus talentos.
Número 33: otorga la habilidad de tomar las decisiones apropiadas y hacer las elecciones correctas. Su mente es fuerte, como resultado de una energía de vidas pasadas que les hizo convertirse en presas fáciles.