En octubre de 2018, Lluvia Paulina Aguirre González, de 30 años, fue secuestrada y asesinada de forma violenta. La joven fue localizada en el kilómetro 35.5 de la carretera México-Cuernavaca, después de tres días de iniciar su búsqueda.
Su cuerpo fue localizado en estado de descomposición, dentro de una bolsa negra en una caja de cartón, tenía una cuerda alrededor de su cuerpo, lo que indica que fue asfixiada hasta la muerte. Además, según información de los familiares, el cuerpo de Lluvia estaba mutilado.
“Las cámaras me enseñaron cuando iba manoteando, cuando la alzaron. Incluso pasaron a una gasolinera, iba manoteando y los otros la iban deteniendo”, testimonio anónimo.
La última vez que Lluvia Aguirre fue vista con vida fue en la alcaldía Azcapotzalco en la Ciudad de México, iba junto con su esposo, quien también fue localizado sin vida, en el kilómetro 23 de la misma carretera.
La pareja tenía planeado cerrar un trato para vender un vehículo, según información de su familia; sin embargo, se perdió contacto con la joven por lo que se dio aviso a las autoridades y se inició un operativo para dar con su paradero. A los pocos días su familia recibió información sobre Lluvia.
Tras su asesinato se inició una carpeta de investigación, pero a diferencia de otros feminicidios, el caso de Lluvia es “complicado”, o eso le dicen las autoridades a sus familiares, ya que señalan que está vinculado con organizaciones delictivas poderosas tanto en México como en Colombia.
“La Fiscalía lo sabía. El caso es muy delicado, es gente muy mala, muy muy mala”, testimonio anónimo.
La autoridades revelaron que la pareja de la joven se dedicaba a la venta de armas de fuego en Colombia, de donde era originario y se le vinculó también con grupos criminales aquí en México, por lo que se llegó a pensar que se trataba de algún tipo de conflicto entre bandas, sin embargo la familia de Lluvia señala a la expareja de este hombre como responsable de los hechos.
Explican que, presuntamente, se trató de venganza y sobre todo celos por ese antiguo amor. Además señalan que esta mujer también está involucrada con bandas criminales. La familia de Lluvia, hasta la fecha, teme por su seguridad, por lo que prefieren mantenerse en anonimato, han perdido la esperanza en las autoridades y en encontrar justicia para la joven.
Lluvia le entregó su confianza y su amor a un desconocido
Antes de involucrarse amorosamente, Lluvia era edecán y trabajaba en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, ahí fue donde conoció a este hombre, quien evitaba hablar a profundidad de su vida personal, solamente decía ser colombiano y que se dedicaba a la compra y venta de vehículos en México.
Ni Lluvia ni su familia sabían toda la verdad sobre el pasado de este hombre, (quien por seguridad no se revela su nombre), ella simplemente pensó que podría construir una vida junto a él, le entregó su corazón y sobre todo su confianza.
“De relación duraron un año, y unos meses. De casados tenían solamente siete meses, se fueron a vivir juntos”, testimonio anónimo.
Iniciaron un noviazgo al poco tiempo de conocerse, todo pintaba bien, como en cualquier relación tuvieron buenos momentos, por lo que no pasó mucho tiempo y decidieron casarse, esto pese a las sospechas y mala espina que generaba en la familia de Lluvia, quienes recuerdan a este sujeto como alguien reservado e indescifrable ya que en diversas ocasiones notaron que se escondía para hablar por teléfono o evitaba platicar de su vida privada.
“A mí la verdad desde que supe que era colombiano, se le veía la facha […] Uno sospecha cuando algo no está bien” testimonio anónimo.
Sin embargo, Lluvia recibió el apoyo de su familia y comenzó una nueva etapa en su vida, sin pensar en lo que sucedería al poco tiempo.
De lo poco que se llegó a enterar Lluvia sobre la vida de su pareja, fue que este sujeto se dedicaba realmente a trasladar dinero de México a Colombia, buscaba clientes para poder realizar los movimientos. También se sabía de su matrimonio anterior y de una hija que tenía.
“Yo le dije, salte de ahí, eso es muy peligroso. Ella me platicó que algo no le olía bien, había tenido problemas con la exesposa”, testimonio anónimo.
A Lluvia no le importaron esos detalles, todo marchaba bien, estaba enamorada y quería construir un patrimonio para ella y su familia, ya que era madre de una pequeña, por quien trabajada arduamente, quería verla feliz y que no le faltara nada, lo mismo con sus padres, ella siempre los ayudó económicamente.
Lluvia dejó un vacío y una gran herida en su familia
Al hablar de Lluvia, su familia recuerda el amor que tenía la joven por los animales, la compasión con la que vivía ya que le gustaba ayudar a los demás. Entre sus mejores características estaba ser trabajadora, amable y amorosa. La describen como una buena persona y una gran madre.
A cinco años de su feminicidio el caso quedó a medias, su familia ya no quiso continuar el proceso pese al dolor de no lograr obtener justicia para la joven. Las autoridades les pidieron mucho dinero a cambio hasta el punto en el que quedaron en quiebra y con la responsabilidad de cuidar a la pequeña hija de Lluvia.
“Yo luché mucho, pagué mucho de abogados […] Dos abogados me robaron, lo ven a uno con desesperación”, testimonio anónimo.
No tuvieron los recursos necesarios, por lo que amigos cercanos a Lluvia intentaron ayudar con lo poco que podían, sin embargo ninguno de los esfuerzos han sido suficiente.
Lo único que resalta la familia fue lograr la custodia de la hija de Lluvia; sin embargo señalan la mala situación económica por la que continúan y comentan que han tenido que atender psicológicamente a la menor, debido al daño causado por la muerte de su madre.
¿Quién fue el feminicida de Lluvia?
En el caso de Lluvia, lo más complejo ha sido lograr tipificarlo como un feminicidio ya que a simple vista se entiende como un asesinato, sin embargo por algunas de las características del caso se puede denominar como feminicidio.
Esta ha sido una de las complicaciones más grandes para su familia y por las que el caso no ha logrado avanzar.
Es importante recordar que en un feminicidio existe un sujeto activo, el cual puede ser hombre o mujer y un sujeto pasivo, el cual en todos los casos corresponde a una mujer.
En nuestro Código Penal Federal el feminicidio se encuentra tipificado en el artículo 325 y se considera que existen razones de género cuando ocurra alguna de las siguientes circunstancias:
- Si la víctima presenta signos de violencia sexual de cualquier tipo
- Infligieron lesiones degradantes previo o posterior a la privación de la vida
- Existió una relación sentimental, afectiva o de confianza
- Si la víctima fue avisada o amenazada de muerte
- El cuerpo de la víctima sea expuesto o exhibido en un lugar público