La falta de estrategia y coordinación del Gobierno del alcalde José Luis Urióstegui provocaron un enfrentamiento entre la policía de Cuernavaca y la ronda de Ocotepec.
A las 13:30 horas de ayer, policías de Cuernavaca detuvieron a Javier Méndez, quien se desempeña como comandante de la ronda de Ocotepec, pueblo indígena de la capital que se rige por usos y costumbres.
Debido a su labor para salvaguardar la seguridad del poblado, el comandante fue asegurado con una pistola y varios cartuchos, en la colonia Lomas de Cortés por lo que fue llevado a la comandancia donde fue golpeado en varias ocasiones.
Sin embargo, tras su detención, compañeros y conocidos del imputado, llegaron hasta la calle Pedro de Alvarado de la citada colonia en donde sorprendieron a un Policía de Cuernavaca, al cual lo despojaron de su arma de cargo y lo golpearon para después llevarlo a la ayudantía del poblado, para exigir que Javier fuera liberado.
Ante el hecho, autoridades municipales y elementos de la Marina implementaron un operativo en la entrada del poblado de Ocotepec para rescatar al oficial retenido, asimismo, habitantes del poblado comenzaron a reunirse para evitar que los uniformados entraran el poblado.
Luego de minutos de negociaciones y tensiones las autoridades municipales accedieron a las peticiones de los vecinos de Ocotepec y dejaron en libertad a Javier Méndez sin que fuera presentado al Ministerio Público, aunque fue golpeado, a cambio de que liberaran al policía local.
Lo anterior evidencia una mala estrategia en la implementación de la seguridad por parte del Gobierno municipal actual encabezado por José Luis Urióstegui.