El domingo pasado alrededor de las 10 de la mañana, el cuerpo de un joven de apenas 18 años fue encontrado en un paraje en la comunidad de Huatecalco. Según distintas versiones, tenía huellas de violencia en el cuerpo. La víctima, José Manuel, conocido como Cheché, había desaparecido el sábado en la noche cuando se dirigía a su domicilio.

Las versiones que comenzaron a correr a partir de este lunes es que a José Manuel y a otros dos amigos los pararon un grupo de elementos del Ejército Mexicano en las inmediaciones del centro de la cabecera municipal de Tlaltizapán, y los golpearon. A los acompañantes de Cheché los dejaron en libertad después de un tiempo.

Sin embargo, José Manuel no apareció. Fue encontrado y reportado a las autoridades hasta la mañana del domingo. Su cuerpo fue localizado en un paraje en las inmediaciones de la comunidad de Huatecalco, al suroeste de la cabecera municipal, a un costado de un puente que cruza el llamado Río Dulce. De acuerdo con las versiones recogidas, el cuerpo presentaba golpes diversos.

Esa zona está llena de cañaverales y viviendas de jornaleros cortadores de vara dulce que provienen de otros estados. La fiscalía se lo llevó a la morgue de la Fiscalía Sur Poniente en Jojutla. Sus familiares se enteraron del hallazgo y acudieron a la Fiscalía a identificarlo. Entre el domingo y el lunes les fue entregado el cuerpo. Por la tarde del 9 de enero, en medio del dolor por la pérdida, familiares y amigos lo despidieron exigiendo justicia por su asesinato.

Desde ese día comenzaron a circular en redes sociales versiones de la denuncia en que se señalaba de forma general que elementos del ejército estaban detrás del asesinato de Cheché. Los otros dos jóvenes que fueron detenidos y golpeados han guardado su identidad y la propia familia se ha negado a informar al respecto por miedo a represalias.

José Manuel acudió el sábado al centro de Tlaltizapán a participar en un “convite”, es decir, una fiesta previa al carnaval que se llevará a cabo en febrero próximo. Tlaltizapán tiene uno de los carnavales más grandes de la entidad, junto con Tepoztlán, Tlayacapan, Jiutepec y Yautepec. El convite consiste en la danza de chinelos por las calles a lo largo del día y luego en la noche un baile popular.

El sábado, el baile acabó ya tarde. Cheché con sus dos acompañantes caminaron a sus respectivos domicilios y en el camino los detuvieron, los golpearon y él ya no regresó a su domicilio. Los familiares se movilizaron para buscarlo a lo largo de la madrugada y a denunciar su desaparición. La Fiscalía halló el cuerpo sin vida, con huellas de golpes en diversas partes del cuerpo en medio de los cañaverales de Huatecalco, en Tlaltizapán.

Hasta el momento las autoridades no han fijado un posicionamiento al respecto. Menos aún, la comunicación del ejército en la entidad. La familia prefiere mantenerse a resguardo por temor a posibles represalias.

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