Una comisión independiente presentó en Francia un esperado informe sobre las víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica desde 1950; acusa una ‘cruel indiferencia’

Más de 216 mil menores fueron víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica en Francia desde 1950, reveló este martes un esperado informe independiente que ahondó en este “infierno” que ya golpeó en el pasado a Estados Unidos y Australia.

Sacerdotes y religiosos abusaron de 216 mil menores entre 1950 y 2020, si bien la cifra ascendería a 330 mil si se tiene en cuenta a los laicos que trabajaron en instituciones religiosas, apuntó la Comisión Independiente sobre los Abusos Sexuales en la Iglesia (Ciase).

Hasta inicios de 2000, la Iglesia católica francesa mostró una “cruel indiferencia” con las víctimas de estos abusos que tuvieron un “carácter sistémico”, subrayó durante la presentación del informe el presidente de la Ciase, el exalto funcionario Jean-Marc Sauvé.

Este católico practicante de 72 años entregó el informe de más de 2 mil páginas, “una pesada carga tanto en el sentido literal como figurado”, a la Conferencia Episcopal (CEF) y a la Conferencia de Religiosos y Religiosas de Francia (Corref), que lo encargaron.

La respuesta del episcopado no se hizo esperar.

“Mi deseo en el día de hoy es pedirles perdón”, dijo el presidente de la CEF, monseñor Éric de Moulins-Beaufort.

Expresó su “vergüenza” y “determinación a actuar” con las víctimas.

Además de evaluar el alcance de los hechos, los expertos (abogados, teólogos, psicólogos, historiadores,…) evaluaron la respuesta de la Iglesia y formularon 45 propuestas para reconocer el dolor de las víctimas, evitar otros casos y reformar el derecho canónico.

La Ciase pide así a la Iglesia que reconozca su responsabilidad “sistémica”, que ponga en marcha ceremonias públicas para honrar a las víctimas y que deje claro que el secreto de confesión no cubre esos delitos, que deben ser denunciados a la justicia.

Otras de las recomendaciones es indemnizar a las víctimas por los “daños sufridos”, pero con el patrimonio de los agresores o de la Iglesia y no con aportaciones de los fieles.

Los hechos ya están prescritos en su mayoría y sus autores ya fallecieron, por lo que es improbable un recurso a la justicia.

El episcopado francés ya prometió para 2022 indemnizaciones financieras, algo que no suscita unanimidad entre las víctimas.

El informe será examinado de cerca en El Vaticano.

El papa Francisco, que debe tener una audiencia privada el 18 de octubre con el primer ministro francés, Jean Castex, según el diario La Croix, ya abordó la cuestión con obispos franceses en septiembre.

Fuente: Excélsior

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