De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, difundidas por el Centro de Investigación Morelos Rinde Cuentas los delitos mencionados tienen la mayor tasa de incidencia por cada 100 mil habitantes.
Morelos ocupa, además, el 2° lugar en homicidio doloso y robo de vehículo.
Por si lo anterior fuera poco, la entidad gobernada por Cuauhtémoc Blanco Bravo también consiguió, en los primeros meses de este año, el deshonroso tercer lugar por la cantidad de secuestros y robo de autopartes.
A la lista de detrimentos debe agregarse también el quinto lugar nacional por violaciones, robo a transporte colectivo y robos a transportistas.
Este desalentador panorama es lo que ha llevado a una asociación de abogados morelenses a ratificar la solicitud de juicio político contra el gobernador Blanco Bravo, cuyo secretario de gobierno, Samuel Sotelo Salgado descartó la semana pasada que existieran argumentos para solicitar tal proceso en el Congreso Local.
Lo impactante de la realidad demostrada con cifras oficiales, contrasta dolorosamente con la latente omisión en los temas de seguridad pública, razón central de la solicitud de enjuiciamiento contra el actual gobernador.
Aún con todos estos datos en contra, el Gobernador Cuauhtémoc Blanco se queda de que «hay una campaña de desprestigio en su contra».