Esta nueva política, que entrará en vigencia desde el próximo 1 de septiembre, busca mejorar la relación de la compañía con los clientes afectados
Aunque la pandemia por el covid-19 trajo grandes inconvenientes para la economía mundial, especialmente para las industrias que requerían de sus trabajadores en puntos físicos para poder desarrollar de forma óptima las actividades laborales correspondientes, no se puede negar que la crisis sanitaria también se pudo haber visto como una “bendición” para las empresas de reparto en el mundo.
De acuerdo con la Oficina Estadística de la Unión Europea (Eurostat), solo en el Viejo Continente el comercio electrónico (o e-commerce) creció un 70 % en 2020, con la pandemia como principal responsable de este crecimiento. Así, empresas como Ebay o Amazon alcanzaron picos impresionantes de envío en gran parte de los países en los que tienen presencia.
Sin embargo, en medio de la bonanza, también se presenta la crisis; que en este caso se traduce en las quejas enviadas por parte de docenas de clientes, que han denunciado la entrega de cientos de productos defectuosos o en mal estado por parte de Amazon.
Cabe recordar que, para este tipo de casos Amazon cuenta con una herramienta denominada “Garantía de la A a la Z”, con la cual brinda “a los clientes un proceso de devolución sin complicaciones para los productos vendidos y distribuidos por terceros”, tal y como lo explica la empresa por medio de un comunicado de prensa.
Ahora bien, de estos clientes insatisfechos, se desprende un reducto que han asegurado ser víctimas de productos en mal estado, ya sea por lesiones personales que les han causado o por daños a su propiedad derivados de su mal funcionamiento.
Teniendo en cuenta esto, Amazon ha establecido una nueva estrategia para tratar “el improbable caso” de que un producto pueda lastimar a alguien, por medio de una indemnización de al menos 1000 dólares por daños y perjuicios.
“En el improbable caso de que un producto defectuoso vendido a través de Amazon.com cause daños a la propiedad o lesiones personales, Amazon pagará directamente a los clientes por reclamaciones de menos de 1,000 dólares, que representan más del 80 % de los casos”, indicó Amazon en su documento.
Asimismo, el gigante de los envíos informó que esta indemnización correrá por su cuenta en todo momento, pues nunca buscará que los vendedores reembolsen dicho dinero a la empresa, esto si los mismos cumplen de forma óptima con las políticas de Amazon y cuentan con un seguro válido.
“Los clientes pueden ponerse en contacto con el Servicio de atención al cliente de Amazon, y le notificaremos al vendedor y le ayudaremos a abordar el reclamo. Si un vendedor no responde a un reclamo, Amazon intervendrá para abordar directamente la inquietud inmediata del cliente, asumir el costo nosotros mismos y perseguir al vendedor por separado”, añadió la compañía.
Ahora bien, como es normal en este tipo de situaciones, en muchas ocasiones las cosas no sucederán de forma sencilla para el cliente que puso el reclamo, pues el vendedor también tiene el derecho de defender, tanto a él como su producto, por lo que no sería raro que se inicie un lío legal en el marco de esta reclamación.
“Si un vendedor rechaza un reclamo que creemos que es válido, Amazon también puede intervenir para abordar la inquietud del cliente; en estos casos, los vendedores seguirán teniendo la oportunidad de defender su producto contra el reclamo. Este proceso simplificado ahorrará tiempo, dinero y esfuerzo tanto para los clientes como para los vendedores. Respaldando a los clientes y los productos de nuestra tienda”, manifiesta el comunicado.
Por último, Amazon indicó que esta nueva política, además de otros cambios relacionados con la garantía de los productos, entrará en vigencia desde el próximo 1 de septiembre.
Fuente: Infobae